Dándole seguimiento a los operativos antinmigrantes, regresamos al Centro de Acogida Vacacional Haina, el lugar donde son llevadas las personas detenidas por falta de documentos. 

En esta nueva visita a la localidad, el panorama encontrado fue totalmente distinto a nuestra visita anterior.

Durante el tiempo agotado en el sitio, la actividad, en cuanto al  ingreso de indocumentados, fue muy baja, casi nula. Durante nuestra presencia allí, las unidades-cárceles utilizados para trasladar a los indocumentados al reclusorio brillaron por su ausencia, igual que las personas que, generalmente, se aglomeran en los  alrededores de la entrada del centro.

Ayer, a diferencia del viernes, a nuestra llegada solo había una persona que pidió reserva de su identidad, esperando obtener datos de un pariente retenido.

Nos comentó que durante el tiempo que tenía en el lugar, unas tres horas, solo un camión, con tres indocumentados, había penetrado al plantel.

“En el tiempo que tengo aquí solo he visto entrar al lugar un camión con una sola persona. Yo estoy aquí hace tres horas esperando para entregarle algo de efectivo a un pariente que lo detuvieron por el porte de supuesta documentación falsa”, explicó el ciudadano.

También abordamos a algunos lugareños para indagar acerca el flujo de arrestados. Estos coincidieron en que la actividad antiinmigrante de ayer había sido poca.